• La prensa argentina muestra su preocupación ante la orden de pago del Tribunal Supremo de EEUU.
  • La presidenta intenta calmar: promete que pagará y que evitará la suspensión de pagos del país.
  • Pero no se 'rebaja':  tacha de "extorsión" la orden de pago del alto tribunal de 1.300 millones de dólares a los 'fondos buitre'.
  • Y los 'fondos buitre' la definen como impagadora "serial".
La prensa argentina ha mostrado su preocupación por la decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos por la que el país tendría que pagar unos 1.300 millones de dólares a fondos de cobertura, conocidos en Argentina como 'fondos buitre'. Y mientras, la presidenta, Cristina Fernández (en la imagen), trata de contener la indignación calificando el fallo de "extorsión". En La Nación, Joaquín Morales Solá comentaba: "Cristina Kirchner se irá como su dinastía llegó al poder: con serios problemas con la deuda pública. Seguramente, esos problemas tendrán menor intensidad que los de 2003, pero la Argentina tampoco será el paraíso desendeudado del que se habló, con más palabras que consistencia, durante más de una década".

Cristina Fernandez ha dicho que "Argentina tiene voluntad de negociación, pero lo que no tiene es por qué ser sometida a semejante extorsión. Ha respondido así después de que la justicia estadounidense rechazase admitir a trámite el recurso del Gobierno argentino contra las sentencias previas en instancias judiciales norteamericanas.

En cualquier caso, Fernández ha ratificado la vocación del país de pagar su deuda. "La voluntad de pago de Argentina está más que probada", argumentó Fernández frente a los fondos buitre que la definen como impagadora "serial", según recoge El País. 

En un mensaje transmitido por la cadena nacional, Fernández anunció que Argentina pagará 900 millones de dólares el próximo 30 de junio (el 92% de su deuda) a los acreedores que se adhirieron a las reestructuraciones de 2005 y 2010, arbitrando "todos los instrumentos y estrategias necesarios".

La presidenta argentina puso como ejemplo los canjes, pero también los acuerdos de este año para indemnizar a Repsol y para abonar la deuda con el Club de París, integrado por 19 países ricos, después de la suspensión de pagos también de 2001.

Volvamos a la prensa. También en La Nación, Carlos Pagni apuntaba: "Como todo presidente expuesto a una crisis de reservas, Cristina Kirchner está de nuevo ante una opción molesta: debe elegir entre preservar su identidad o mantener la gobernabilidad."

Por su parte, en el mismo periódico, Fernando Laborda señalaba: "El fallo de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos fue un baldazo de agua fría para el gobierno argentino y para el mercado local".

Mientras que también en La Nación, Néstor O. Scibona afirmaba: "Lo que dijo anoche Cristina Kirchner fue que su gobierno va a cumplir el 30 de junio próximo con el pago del vencimiento por 900 millones de dólares del cupón del bono Discount al 92% de los bonistas que aceptaron el canje y que no aceptará la "extorsión" judicial de los fondos buitre".

Para Clarín, "el hecho de no cumplir con el fallo implica iniciar un nuevo camino, más difícil, y seguramente mucho más trabajoso para que la Argentina pueda conseguir el financiamiento necesario para aumentar la inversión y posibilitar el crecimiento".

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com