Sr. Director:

La policía de una ciudad norteamericana, superada por la conflictividad de sus jóvenes, elaboró un decálogo donde explicaba el camino más corto para formar delincuentes.

1. Dé a su hijo todo lo que le pida. Así crecerá convencido  de que el mundo le pertenece.

2. Si habla con expresiones groseras, ríale la gracia para animarle a ser más grosero.

3. No le dé ninguna educación espiritual. Ya la elegirá él cuando sea mayor. No le reprenda nunca. Podrá crearle complejo de culpa. Recoja todo lo que él deja tirado : libros, zapatos, juguetes, ropa Ahórrele todo esfuerzo. Así creerá que todo el mundo debe estar a su servicio.

4. Que lea todo lo que caiga en sus manos. Cuide la limpieza de sus platos, vasos y cubiertos, pero deje que su corazón y cabeza se llenen de basura. Riña y discuta con su mujer o con su marido en presencia de su hijo. Así no se sorprenderá ni le dolerá demasiado el día que la familia se rompa.

5. Déle todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que es preciso trabajar para gastarlo. Satisfaga todos sus deseos, placeres y caprichos. La sobriedad le llevaría a una frustración perjudicial.

6. Póngase de su parte en cualquier conflicto con los amigos, vecinos o profesores. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo, que le han tomado manía y le quieren mal.

Si usted pone en práctica estos consejos, prepárese para arrepentirse toda su vida, y procure consolarse con la disculpa más fácil: nunca pude con este muchacho. Pienso que esto tiene gran actualidad ante lo que vemos los fines de semana o  la violencia y otras lindezas que pasan en algunos colegios de nuestro país

José Pardo

jpardoibo@gmail.com