En la constructora no entienden la actitud del presidente de la CNMV en apoyo de E.ON. Por otra parte, Caja Madrid se niega a colaborar con los Entrecanales y no parece el apoyo prometido por Moncloa. José Manuel Entrecanales se juega el prestigio en el clan. Por eso, amenaza al Gobierno con dar el pelotazo y dejarle vía libre a los alemanes. La operación se encuentra en el filo de la navaja, justo cuando E.ON presenta unos beneficios inferiores a los de Endesa

La mañana del miércoles fue dura en la sede de Acciona. La marejada ya venía de atrás porque el actual hombre fuerte del clan, el joven José Manuel Entrecanales se está jugando su fututo profesional. Fue él el convencido por Zapatero para que entrara en la pugna por Endesa y se enfrentara directamente a E.ON. Lo que ocurre es que Moncloa les había prometido socios que compartieran el fardo financiero de controlar la primera eléctrica española. Y ese socio o socios no llegan. De hecho, el hombre más rico de España, Amancio Ortega, buen amigo de Zapatero y de Miguel Sebastián, ya rechazó una invitación en este sentido.

Además, Caja Madrid no quiere ni oír hablar de apoyar a los Entrecanales en su pulso con E.ON. Está claro que Miguel Blesa está jugando a favor de Manuel Pizarro y está claro que Manuel Pizarro prefiere la opción alemana.

Por si todo lo anterior no bastara, el presidente de la CNMV, Manuel Conthe sorprendía a los Entrecanales con un decisivo apoyo a E.ON. En su habitual lenguaje equívoco Conthe aduce que si gas natural desea información sobre la OPA de E.ON, debe acudir a él. La verdad es que GN no desea información, sino que acusa a Endesa de haberle pasado información a E.ON, cosa bien distinta. En cualquier caso, si un juzgado imputa a los alemanes por uso de información privilegiada, es evidente que el regulador no puede seguir adelante con la OPA.

En resumen, las palabras de Conthe han descolocado a GN, pero también a Acciona, quien empieza a desconfiar de la fidelidad del Gobierno. No olvidemos que José Manuel Entrecanales hizo valer su apuesta por Endesa en la confianza de que si no obtenían el control de la eléctrica, al menos habrían ganado muchos millones en pocas semanas. De hecho, este es el quid de la cuestión. Mientras Moncloa anima a los Entrecanales a seguir adelante pero no les proporciona socios, el clan constructor advierte al Gobierno que si no tienen ayuda, serán ellos mismos quienes vendan a E.ON su participación del 20%.

Por si fuera poco, un día después de la presencia en Madrid del presidente de E.ON, Wulf Bernotat, la eléctrica presentaba unos resultados muy flojos. Entre enero y septiembre E.ON ganó 2.629 millones de euros, un 60% menos que durante el mismo periodo de 2005. Eso significa que la opante E.ON obtuvo menos beneficios que la opada Endesa, que en ese mismo periodo obtuvo 3.175 millones de euros de excedente.