La jornada informativa del martes 23 se inició en Madrid, Hotel Ritz, donde el fiscal general del Estado Cándido Conde Pumpido defendió muy ilusionado, ante los asistentes al Foro de la Nueva Economía, el nuevo Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, así como su labor al frente de la FGE.

Defendió por ejemplo, la teoría de los fiscales especializados, quienes aseguran, en medio de una cuerpo descentralizado, la unidad de actuación necesaria. El modelo, según él, son los fiscales de violencia de género, es decir, los comandos ultrafeministas, cuyos logros son de todos conocidos.

Al mismo tiempo, Conde se mostró muy feliz con la lucha de los fiscales contra los delitos económicos. No se inmutó, a pesar de que todo la labro de la Fiscalía en la lucha contra los delitos económicos está marcada por la defensa pétrea que la Fiscalía realizaron del banquero Emilio Botín en el caso de las cesiones de crédito, donde tras 14 años de instrucción con una presunta estafa multimillonaria a la Hacienda pública, la fiscalía consiguió que el juez Gómez Bermúdez cerrara el caso en la vista previa. Lo cual, no impide que la misma Fiscalía persiga a los titulares que hicieron caso al banco presidido por Emilio Botín y firmaron cesiones de crédito.

Por si no había quedado clara la concepción de la justicia que tiene Conde Pumpido, no dudó en compartir con empresarios y políticos, la preocupación por la instrumentalización de la justicia. Incluso ha convencido al Supremo para que abra proceso judicial a quien según él utilizan a la justicia, en referencia a Manos Limpias, al que calificó, sin citar, como grupo ultraderechista. En resumen, que don Cándido está con los fuertes frente a los débiles en defensa de la justicia. Todavía no ha perdido sus esperanzas de ser el presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo.

En el problema vasco, Conde Pumpido se mantuvo en la misma línea progubernamental: no ilegalizará al Partido Comunista de las Tierras Vascas porque, según él, no es un remedo de Batasuna. Respecto al asesino De Juana Chaos, en huelga de hambre, Pumpido mantuvo su misma actitud: es partidario de no modificar la postura de la Fiscalía seis años de cárcel.