Los ayuntamientos están recurriendo la imposibilidad de endeudamiento a partir del próximo 1 de enero

Chaves pospone sine die la nueva financiación local. No es el momento. La crisis no da tregua y lo que faltaba es que pariera la abuela. El problema es que el Gobierno se había comprometido a que el nuevo modelo sería paralelo al de financiación autonómica y no fue así. Después que estaría listo en el 2010 y va a ser que no. La pregunta es: ¿para qué sirve entonces el vicepresidente tercero?

En paralelo, muchos ayuntamientos están recurriendo el zapaterazo que les impide endeudarse a partir del próximo 1 de enero. El problema es que no tiene sentido endeudarse cuando tienen las facturas pendientes de pago. Y no pocas: cerca de 35.000 millones de euros. En algún momento habrá que frenar una locura colectiva que consiste en que los ayuntamientos gastan sin pagar. Sencillamente no es sostenible en el tiempo. Ni en el largo ni en el corto.