Para Manuel Cerdán, en Tele 5, Garzón, con la personalidad que tiene, es difícil de coartar. Siempre ha tenido libertad para opinar y vemos los libros que ha escrito y algunos párrafos son bastante estridentes en sus opiniones sobre otros personajes públicos. Al final (en el CGPJ) existen unos repartos de poderes, hay una suma matemática de una corriente política y si no le interesa vota en sentido contrario. Yo creo que al ciudadano le preocupa que a veces la personalidad de los profesionales se proyecta demasiado en sus actividades judiciales. Y eso no es bueno. Intencionalidad política ha habido con los peritos y en lo judicial.