Un semanario católico ha sido condenado en Polonia por incitación al odio. La acusación es grave porque siembra más censura progre. En pocas palabras: no se puede llamar homicidio al aborto ni homicida a la mujer que mata a su hijo indefenso.

Igualito que en Wikipedia, donde la definición de aborto no puede conllevar los términos homicidios, asesinato, etc. Es decir, que el embarazo se interrumpe sin que sean conocidas las causas y, en cualquier caso, sin ningún juicio moral.

Ahora bien, si el hombre no realiza juicios morales, el hombre no piensa (no lo digo yo, lo dice Kant).

Es la censura progre, que nos dice algo peor que lo que podemos decir o debemos callar: nos dice lo que debemos pensar, el sueño de todo tirano: controlar las mentes y las voluntades. Lo que usted debe pensar para no convertirse en un excluido.

Eulogio López

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