Artur Mas votó a favor de la prohibición y Montilla en contra

Finalmente la Fiesta Nacional queda prohibida en Cataluña. El argumento de base es el de no hacer daño a los animalitos, aunque en muchos casos no se reconoce el deseo de expulsar todo lo que huela a español. Si no, no habrían excluido las fiestas de los bous al carrer.

La censura sale adelante con los votos de nacionalistas y socialistas. Como había libertad para votar en conciencia (algo que invita a pensar que en el resto de las ocasiones la conciencia no cuenta y eso es preocupante), se produjeron excepciones: por ejemplo, Montilla dice apostar por la libertad y votó en contra de la prohibición. Por su parte, Artur Mas votó a favor.