A Ciutadans se debe la autoría de esta joya de la ironía, a ellos la gloria del sarcasmo por años.

Se trata de un remedo de la película Casablanca, un vídeo de algo más de 9 minutos para describir el asfixiante ambiente que el tontuna nacionalista ha impuesto en Cataluña, precisamente uno de los pueblos con más sentido común de toda España.

Lo de la tontuna nacionalista no es una exageración. Lo demuestra lo de los subtítulos de culebrones en castellano y en árabe y, en pocas palabras, viene a resucitar el viejo drama del nacionalismo, un callejón sin salida, con el que todo acuerdo es imposible porque no busca el Estado de Derecho sino los límites del Estado. Dicho de otra manera, en el campo de batalla nacionalista no se lucha por unos principios -como ocurre con las ideologías, la justicia social o las guerras de religión- sino por un sentimiento y, por lo general, ni tan siquiera por eso: sólo se lucha por cuotas de poder. No es una batalla de ideas sino de identidades, sólo apta para psicoanalistas. Y ya se sabe que los psicoanalistas suelen tener la mente muy sucia.

Por favor, disfruten con Casablanca de Llobregat. Merece la pena.

Eulogio López

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