Días atrás hablábamos que Maurizio Carlotti, el consejero delegado de A-3 TV, estaba empeñado en convertirse en interlocutor del Gobierno Zapatero y que no dudaba en echarle un pulso a su presiente, José Manuel Lara para inclinar el canal hacia el izquierda. Y también que Carlotti quería que el canal comprara El Mundo.

Pues bien, desde Planeta comentan que Carlotti sería un loco si retara a Lara: Marco Drago, presidente de De Agostini, nucna traicionará al catalán. Y esto no tiene nada que ver con el nuevo reparto accionarial de Kort Geding, la sociedad conjunta con la que Planeta y De Agostini controlan A-3 TV.

El caso es que el propio Lara no sabe qué hacer con el diario La Razón, y de buena gana lo cambiaría por El Mundo, aunque tuviera que soportar los caprichos de Pedro José Ramírez. Además, Lara reparte sus fidelidades políticas entre el Tripartito catalán de Pasqual Maragall y el PP de Mariano Rajoy.

Maurizio Carlotti es un tipo curioso. Honrado con los accionistas y durísimo con sus trabajadores, y obsesionado con que valoren su trabajo convenientemente, es decir, mucho. Carlotti amenaza con marcharse. Suya es la famosa frase, que repite a menudo, de que él es capaz de hacer un canal de TV con menos de 200 trabajadores. Si sigue así, a lo mejor le ficha Jesús Polanco, al que tampoco gustan, lo que se dice nada, las plantillas numerosas.