Todos los medios de comunicación están vendiendo que Salgado y Campa se van a Europa de road show. Cierto. Pero cada uno por su lado. El secretario de Estado de Economía, más quemado que la pipa de un indio, aspira a no destruir más su imagen de lo que ya lo ha hecho. Así que ha decidido hacer un road show, pero separado de su jefa. Salgado tratará de convencer a las agencias de calificación de que España es un país serio mientras que Campa se va a trabajar los bancos. Empezando por el Barclays. No lo tienen fácil porque la realidad es que todas las reformas anunciadas; pensionazo, recorte del gasto público y reforma laboral han quedado en nada. La mañana del lunes, el Ibex ha amanecido en positivo; aunque ya se ha dado la vuelta. Las pantallas parecen un campo de amapolas.
