El presidente del Parlamento Europeo, José Borrell, hizo en la mañana del lunes una interesante reflexión sobre los costes de la sociedad mediática. En su opinión los políticos están más centrados en las emociones que en las soluciones. Mostramos inmediatamente nuestra solidaridad frente a las catástrofes aunque esa muestra sentimental no se traduzca prácticamente en nada. Borrel realizó una autocrítica a la respuesta inmediata frente a la realidad. Las verdaderas soluciones se alcanzan a medio plazo fuera de los medios de comunicación y son racionales, no sentimentales. En resumen, Borrell critica en el fondo que los políticos se estén dejando arrastrar por lo que califica como antipolítica, el efecto no deseado de la sociedad de la información.