No está gustando nada en el Gobierno el apoyo eclesiástico a la manifestación ciudadana convocada por diversas organizaciones ciudadanas en defensa de la libertad de Enseñanza. Como socialista y como cristiano, me preocupa que desde algunos ámbitos de la jerarquía se fomenten estas actitudes, apunta Bono, que sin embargo, señala que defendería de nuevo su derecho de manifestación y no sólo junto al Jefe del Estado, apuntala con mala leche.

Bono señala que es posible que tengan razones, aunque también señala su ignorancia sobre el asunto. No obstante, señala que su creencia como cristiano le lleva a otros escenarios: el del obispo de Palencia que dejó la mitra y se fue con los más pobres o Vicente Ferrer. No sé si los curas o las monjas son de los nuestros, pero yo quiero ser de ellos, señala demagógico.