El Parlamento Europeo condena la violencia de Marruecos en El Aaiún y exige una investigación internacional.
Una victoria a medias del Polisario en Europa y un tirón de orejas a la política exterior del Gobierno de España. Así se podría definir la resolución que ha tomado este jueves la Eurocámara con respecto a los acontecimientos del mes pasado en El Aaiún.
Aunque no se han atrevido a censurar explícitamente la actuación de Marruecos, muy en línea con la política del temor (temor a que si Marruecos ahora es como es, imagínate cómo puede ser si se convierte en nicho de terroristas islámicos), al menos han deplorado la pérdida de vidas humanas y se lamentan los ataques a la libertad de prensa.
Ciertamente esta resolución no va en línea con lo defendido hasta ahora por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que ha confiado en todo momento en la información recibida desde el reino alauí. También es, claro está, otro suspenso de la labor llevada a cabo por la nueva ministra de Asuntos Exteriores quien ahora no tendrá otra opción que esperar a que la investigación internacional saque las conclusiones del conflicto.
Lo malo es que mientras todo esto se lleve a cabo, los saharauis que viven en El Aaiún seguirán padeciendo las maniobras de Marruecos y la resolución, quizás, llegue demasiado tarde.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com
