Para defender la seguridad jurídica de las mujeres y su intimidad

La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, participaba este martes por la noche en un encuentro organizado en Caixa Forum. En dicho entorno, anunció un próximo decreto sobre el aborto con el fin de garantizar la confidencialidad de las mujeres que abortan. ¿Quizás van a requerir a los centros abortistas que cuiden de sus fichas en lugar de tirarlas a la basura sin ningún tipo de garantías? ¿Les preocupa que hayan aparecido miles de fichas de mujeres? O quizás, más bien, lo que quieren es cerrar el paso a los tres jueces de Madrid y dos de Barcelona que se han arremangado a investigar presuntos delitos de abortos ilegales.

Tal parece. Y eso explica  las prisas. Por eso se hará en "un par de meses", según Aído. ¿Y la reforma legal? Ya veremos. No corre prisa. Y sobre todo, no tienen garantías de que pueda pasar el filtro del Constitucional si no es forzando demasiado su independencia. Mejor no tocarlo. Lo de Romanones: haz tú las leyes y déjame a mí los reglamentos.

Sin embargo, Pepiño Blanco insistía en la mañana de este miércoles en la necesidad de actualizar la ley y reflexionar por qué ha fallado en el servicio público. ¿Quizás porque cumplen la ley? Blanco apela al consenso social para "dar mayores garantías y derechos para todas las mujeres". Vamos, que no se entera de mucho, aunque señala que "algo estamos haciendo mal las administraciones públicas". Algo es algo.