Es la denominada la reformita, cada vez más extendida. En otras palabras, la reforma laboral del Gobierno se enfrenta a una huelga general de los sindicatos pero no satisface a los empresarios. Bueno, no satisface a casi nadie. El BBVA lo ha puesto por escrito en su informe de coyuntura correspondiente a este tercer trimestre del año: esta reforma laboral es una reformita que no creará empleo.
Otro varapalo del informe del servicio de estudios de Francisco González al ejecutivo Zapatero: 2010 cerrará con un PIB a la baja, del 0,6% (en España, sólo a partir del 2% de crecimiento se crea empleo neto).
Y lo más importante, aunque el banco apoya la subida del IVA (1 de julio) pide rebajar los impuestos directos, justo lo contrario de lo que pretende la vicepresidenta económica Elena Salgado. Bueno, Salgado habla de subir tasas y costes de prestaciones (copago sanitario, educativo, etc.) pero es lo mismo.
Eulogio López
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