• Y cuenta con el apoyo del ministro Luis de Guindos.
  • Aunque en el FROB hay quien piensa que eso supone un riesgo de mercado.
  • En particular, Goirigolzarri insiste en no privatizar hasta saber si se podrá repartir dividendo con cargo al ejercicio 2014.
  • El presidente de Bankia considera que otra cosa depreciaría el valor real de la entidad.
  • Y no se conseguiría el gran objetivo, que es devolver los 22.000 millones de inversión primaria que realizó el Estado.
  • Pero Guindos, el gran valedor de Goiri, ya piensa en Europa.
  • Y sin Guindos en el Gobierno, también se difumina el sueño de echar a Francisco González a través de una fusión, a dos años vista, entre Bankia y BBVA.

Bankia insiste a su propietario, el FROB: que resista la tentación de sacar nuevos valores a bolsa tras la privatización del 7,5%. Por lo menos hasta 2015 o, para ser más exactos, hasta que se sepa si la maquinaria de Bankia ha generado los suficientes fondos como para repartir dividendo con cargo al mismo ejercicio 2014, es decir, en 2015.

Y el caso es que el ministro Luis de Guindos apoya a Goirigolzarri (ambos en la imagen). No sólo porque el presidente de Bankia ha conseguido el mejor saneamiento de los nacionalizados sino porque ha hecho de Bankia el ideal de entidad bancaria para Luis de Guindos: banca comercial bien llevada, desaparición completa de las participaciones industriales, sueldos tasados para los directivos y pocos problemas con créditos corporativos -que son los que ocasionan mas escándalos-. Es cierto que Goiri no hace otra cosa que cumplir con los límites impuestos por la Troika, pero lo cierto es que los cumple con eficiencia.

No todo el mundo piensa así en la propiedad. Fuentes del FROB insisten en que retrasar el proceso de privatización por paquetes supone un riesgo de mercado, con unas bolsas muy volubles, sobre cuya evolución pocos analistas se atreven a hacer afirmaciones rotundas (aunque esto no es novedad: rara vez hacen predicciones rotundas).

Además, hay un riesgo añadido: Guindos. El gran valedor de Goirigolzarri, el ministro que tenía planeada una fusión, a dos años vista, entre BBVA y Bankia, ya piensa en Europa, y con él fuera del Gobierno también se difumina el sueño de echar a Francisco González.

Por ahora, Goiri gana: se trata de revalorizar Bankia hasta conseguir devolver todas las ayudas públicas al capital recibidas, lo que supone 22.000 millones de euros.

Pero sí, el riesgo persiste.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com