• Además, a pesar de reducir su actividad, aumenta la morosidad hasta el 4,93%.
  • El primer banco que presenta resultados de este año ve cómo su beneficio se estanca.
  • Solo crecen el crédito al sector público ( 5,6%) y sus depósitos ( 41,6%), como corresponde a una etapa de desapalancamiento privado y déficit público alto.

Ciertamente, las cuentas del primer trimestre de este año que ha presentado José García Cantera, consejero delegado de Banesto (en la imagen), son muy duras. Y eso que no se trata de una entidad en crisis.

Para empezar, el banco tuvo que dedicar nada más y nada menos que 517 millones de euros a sanear su cartera de créditos ( 66%) y de inmuebles, a que obligó el RDL 2/2012), para lo que ha tenido que dedicar plusvalías extraordinarias de 365 millones de euros, tras lo cual el banco ha dado un exiguo resultado de apenas 20 millones de euros, un 88% menos que el del mismo periodo de 2011.

Si con estos deterioros, y otros 500 millones de euros más en inmuebles que anuncia el banco hasta fin de 2012 para cumplir con el RDL (2/2012), se acabara la cosa, habríamos alcanzado el fin de la crisis. Si no, y dado que ya no hay palancas para aumentar ingresos y reducir gastos, también habríamos llegado a otro fin pero distinto.

Asimismo, en la nota remitida a los medios, Banesto señala que la "morosidad continúa por debajo del sector y se mantiene en el 4,93%" (fue del 4,15% en el primer trimestre de 2011). Cierto, pero es que también ha caído su actividad: su inversión crediticia ha disminuido un 8,7% respecto al mismo periodo del año pasado.

Por otra parte, el margen de intereses continúa estrechándose como consecuencia de la reducción del crédito y el incremento de los costes financieros. El recurso a las comisiones y a la reducción de gastos de explotación ha llegado a su fin y las primeras no sólo no suben, sino que bajan un 1,8%, y los segundos apenas caen un 0,3%.

Sólo el crédito al sector público crece ( 5,6%), así como sus depósitos ( 41,6%), como corresponde a una época de desapalancamiento privado (-9,6% de crédito a este sector y retirada de depósitos de casi el 13%) y déficit público alto que lo absorbe todo.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com