El banco presidido por Ana Patricia Botín reduce en un 6,1% su red de oficinas

Banesto inauguró una vez más la ronda de presentaciones de resultados trimestrales. El consejero delegado, José García Cantera, dio detalles este jueves sobre las cuentas de Banesto en los tres primeros meses del año. Unas cuentas caracterizadas por un ligero crecimiento del margen neto, que alcanzó los 211,5 millones de euros, un 0,3% más que el del primer trimestre de 2009. La morosidad continuó aumentando hasta el 3,12%, 1,5 veces más que en el mismo periodo del pasado ejercicio.

Como novedad, este primer trimestre Banesto también se apuntó al sale and lease back: vendió sucursales que le han reportado 70 millones de euros de plusvalías, aunque se mantiene en ellas en régimen de alquiler. En su presentación, García Cantera explicó que la totalidad de esas plusvalías se ha destinado al saneamiento de inmuebles, que suponía 91 millones de euros. La entidad tiene previsto repetir la operación con algunos flecos que han quedado pendientes para el segundo trimestre.

Cabe destacar que, con respecto al primer trimestre de 2009, la red de oficinas de Banesto ha menguado en un 6,1% con el cierre de 116 sucursales, que ha supuesto la marcha de 658 empleados. Pero esto es sólo el comienzo para el sector, que viene insistiendo en la necesidad de reducción de su capacidad. De hecho, García Cantera insistió una vez más en que el objetivo de Banesto es el crecimiento orgánico. Así, en el proceso de reestructuración bancaria, lo que le interesa al banco son los clientes y no las oficinas. A eso parecía referirse la nota interna de Ana Patricia Botín a sus empleados publicada en Expansión: Muchos de nuestros competidores están despistados y debemos aprovecharlo para captar negocio, decía la carta de la presidenta de Banesto.

El cierre de oficinas bancarias coincide además con una práctica muy extendida entre los grandes bancos, y de la que Hispanidad dio cuenta hace tiempo haciendo referencia a Banesto: se trata del franquiciado, que permite contar con oficinas con la imagen del banco, pero cuyos riesgos asume un tercero.
Rodrigo Martín
rodrigo@hispanidad.com