No creo que el diario ABC haya realizado demagogia alguna al publicar los salarios de los dos personajes que nos recomiendan (o exigen, que de la Troika hablamos) que nos reduzcamos los salarios un 10%: Christine Lagarde y Olli Rehn (en la imagen).

Sería, como decíamos en nuestra anterior edición, la mejor manera de destrozar la economía española y la economía de los españoles, además de una injusticia de tomo  y lomo: un horror.

Y además de un horror, un gran error. Lo que precisa España es subir los bajos salarios netos, sobre todo el salario mínimo interprofesional (754 euros brutos al mes por doce pagas) y reducir los altísimos impuestos laborales, especialmente las cuotas sociales. ¿En un 50% Y lo que haga falta, porque los impuestos sobre el empleo, al igual que la fiscalidad sobre el patrimonio, constituyen una confiscación de la propiedad privada.

En otras palabras, que el empresario pague al trabajador, no al Estado. Pero es el Estado, es decir, los gobiernos, quienes cobran esos impuestos... a costa del salario de los trabajadores y de los autosalarios de los autónomos y emprendedores.

En estos dos casos aún peor: porque los autónomos y la mayoría de los emprendedores se ven obligados a cotizar muy bajo y a no tener paro.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com