Lunes 19, 19,30 de la tarde en un céntrico hotel de Madrid. Sarao de los halcones del PP con la excusa de la presentación de un libro de FAES sobre la salida de la crisis. Aznar entierra el hacha de guerra y se fotografía con Rato y Rajoy. Es de las pocas veces en las que se ve a Aznar y Rato juntos. Rato había marcado distancias con el ex presidente. En primer lugar por haber elegido con su dedazo a Rajoy como sucesor. En segundo lugar por habernos metido en esa puta guerra. Pero este lunes las aguas volvieron a su cauce. Rato tiene colmada su ambición con la presidencia de Caja Madrid y ya no anda como gato enjaulado tipo Sonsoles. Por su parte, Aznar asegura que Rato es el mejor ministro de Economía que ha tenido la democracia española. Asunto zanjado.
Segundo asunto: Rajoy. Es evidente que Aznar lamenta haberse equivocado nombrándole sucesor. Ha sido muy critico con la falta de arrestos del actual presidente del PP. De Gürtel, Aznar le toma la delantera y afirma que el PP debe ser incompatible con la corrupción. Del FROB, Aznar muy crítico, Rajoy apoyo crítico. De la financiación autonómica, Aznar pestes, Rajoy abstención y posterior apoyo. Y así, suma y sigue. Pero este lunes firmaron la pipa de la paz y Aznar piropeó a Rajoy. Segundo asunto zanjado.
Y resuelta la paz interna, a lo importante. Aznar arremete con dureza contra los socialistas a los que acusa de ser incapaces de salir de la crisis. Dice que pedirle al PSOE que cree empleo es como pedirle peras al olmo. Y concluye: La crisis, el paro y el despilfarro forman parte del ADN del PSOE.
Andrés Velázquez
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