• La empresa se queda con el 30% de los beneficios de las aplicaciones que sus dueños quieren destinar a ONGs.
  • Es la misma cantidad que ingresa la compañía si no existe donación del beneficio por parte de los desarrolladores.
  • Para evitarlo, los creadores de aplicaciones optan por sacarlas de la Appstore y meterlas en Safari.
  • No hay cifras oficiales, pero el negocio generado por las aplicaciones podría suponer unos beneficios de 750 millones de euros anuales para los de Cupertino.

Es habitual que las donaciones de empresas y particulares a asociaciones sin ánimo de lucro tengan beneficios fiscales, es decir, que no paguen impuestos o lo hagan mínimamente.

Pero en Apple no es así, al menos en lo que respecta al negocio generado por las aplicaciones. Por contrato, la empresa se queda con un porcentaje de los beneficios que genera cada aplicación de su Appstore. Porcentaje que ronda el 30%, pero que puede ser superior dependiendo del precio de la aplicación.

¿Pero qué pasa si el creador de una aplicación quiere donar sus ingresos a una ONG Que a la empresa de la manzana le da igual: se sigue quedando con el 30% de esos beneficios. Muy solidario por su parte.

Aunque no hay cifras oficiales, existen estudios que hablan de unos 750 millones de euros anuales que Apple ingresa únicamente por el negocio de las aplicaciones. La empresa sí afirmó en mayo de este año que desde julio de 2008 -cuando se abrió la Appstore- se han descargado más de 50.000 millones de aplicaciones, unas 2.000 millones al mes, más de 800 por segundo.

Vistos los números, no estaría de más que el CEO de la compañía, Tim Cook (en la imagen), decidiera no gravar la solidaridad. De momento, hay desarrolladores que han optado por sacar sus aplicaciones de la Appstore y meterlas en Safari -el navegador de Apple- desde donde pueden gestionar sus ingresos libremente. Además, se ahorran los 80 euros que cobra la empresa a cada aplicación por entrar en la Appstore.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com