Sr. Director:

El magnífico espíritu del 15-M, el mismo que se sigue manteniendo gracias a la colaboración de todos aquellos indignados que aún permanecen en él y los que apoyamos en determinadas ocasiones, no debe decaer caer en manos equivocadas.

 

Para ello sería conveniente canalizarlo como opción política, la rabia y el hartazgo contra la clase política existente ha servido únicamente como castigo hacia una de ellas, de ahí la pérdida de votos por la abstención a lo que condujo el 15-M, muy bien aprovechada por la oposición que no ha ganado votos, sino que ha mantenido los suyos por esa tropa fiel que les sigue, secundada por la Prensa y Bancos que mantienen un discurso común, de hecho solo hay que ver las portadas y encabezamientos de todos los diarios, una consigna común y un solo titular, siempre contra el partido en el poder, nada sobre los procesos y encausamientos de los nuevos o anteriores dirigentes en sus filas y reelegidos a pesar de su corrupción, pero con una práctica común.

Casi todos al llegar a la poltrona se suben los sueldos a pesar de los 5 M de parados, cuando han pregonado austeridad para todos, y solo la aplican drásticamente en los Gastos Sociales. Luego privatizarán la Sanidad con el copago que están aplicando en determinados lugares, la educación será el siguiente paso, ya están entregando Colegios y Hospitales a empresas privadas, hablan de reducir los empleados en la Administración Pública y así un rosario de medidas que están aplicando desde las CCAA y municipios que gobiernan poco a poco, a la espera del asalto final tras las elecciones generales.

El 15-M debe encauzar su ideal en una opción política clara y contundente, para plantar cara a estos desalmados que aprovechan los votos para representarse a sí mismo, nada mejor que la Decisión Ciudadana para cambiar esa tendencia y elegir sus representantes, ahora hay cierto atisbo llamado guiños hacia las reivindicaciones del 15-M, todo pura pantomima electoral del perdedor en las últimas elecciones, el otro contrincante electoral, ni siquiera eso, se ven sobrados, su "clá" sigue fiel, el desgaste del otro les llevará al poder según creen, sin despeinarse ni trabajar, incluso con un discreto silencio al 15-M, ni apoyo ni en contra, solo silencio.

Piensan que les beneficia como desgaste a su contrario, si llegan al poder harán lo mismo que han hecho en Cataluña, pero por ahora un discreto silencio, después aplicarán el lema de Fraga en 1976 "la calle es mía" y actuará con muchísima contundencia, por ello es necesario esa opción política, debemos de ser consecuente con la fuerza de nuestros ideales y plantarles cara donde más le duele, al Parlamento con el voto, quedan escasamente siete meses o tal vez menos, para que no ocurra como en Túnez o Egipto, donde consiguieron derrocar al dirigente pero no han conseguido ninguna mejora social, pusieron un recambio que siguen rindiendo pleitesía a los mismos, igual ocurrirá en Libia olvidada últimamente, para que el espíritu del 15-M mantenido en pie durante estos meses sea eficaz, debemos expresarlo en las urnas votando de forma clara y contundentemente, para conseguirlo debemos elegir o crear una opción política que aúne ese espíritu de rebeldía donde tenga cabida y se vea plasmado en su programa reivindicaciones del 15-M.

José Enrique Centén Martín