• La entidad aumenta un 46% los fondos de inversión gestionados.
  • El crédito se despereza, pero muy poco a poco, aunque el concedido por el Sabadell al circulante aumenta un 12%.
  • Golpe de autoridad en el negocio típico bancario: aumenta el margen de intereses más de un 25%.
  • La entidad catalana gana un 42,5% más, hasta 265,3 millones de euros, y supera las previsiones.

Antes de comentar el buen resultado que ha presentado este jueves la entidad presidida por Josep Oliu, me voy a fijar en un dato que estos últimos días estoy observando con evidente interés, y que a falta de ver los resultados del Popular y el Santander, puede marcar uno de los mejores datos de la salud de las entidades de crédito españolas. Se trata de la recuperación de los márgenes de intereses después de la convulsión que supuso la caída del Euríbor en plena batalla de captación de pasivos de clientela a tipos que hacia tiempo que no se veían.

Cierto es que la aportación del margen de intereses no es la partida numéricamente hablando más determinante de la cuenta de resultados, pero sí es la más significativa de la gestión clásica de una entidad financiera. Pues en este caso, Banc Sabadell da un fuerte golpe de autoridad incrementando su margen de intereses en un 25,3% respecto a 2013, lo que significan 1.650 millones de euros. La importancia de este margen está en la capacidad que da para soportar incrementos en partidas de gastos como provisiones para insolvencias, seguramente arrastrando infradotaciones de las carteras de los bancos adjudicados, por 1.725 millones de euros, un 29,3% más que en 2013. Los casi 100 millones más en gastos de personal -en gran parte gastos no recurrentes por los ajustes de plantilla-, están compensados parcialmente con los 85,3 millones de plusvalías por ingresos extraordinarios (en su mayor parte debidos a la firma de un contrato de reaseguro con SCOR Global Life).

Completamos la cascada de datos conocidos este jueves: las comisiones han aumentado un 14,5%, hasta 629,6 millones. La explicación está en los incrementos en operaciones fuera de balance (gestiones de capital privado en su mayoría), unos 50 millones más en resultados de cambio. Sólo así puede resultar un beneficio como el que este jueves se ha anunciado de 265,3 millones de euros, un 42,5% más que en 2013, que, según indica la entidad, ha superado con creces la previsión de su plan trianual.

En otros aspectos no menos relevantes, parece que, a la vista de lo que pueda pasar con aspectos extra económicos, más concretamente político identitarios, Banc Sabadell continúa su "diversificación geográfica", con la compra en este semestre del JGB Bank en Miami, por un total de 36,4 millones de euros. Ha vendido una cartera de créditos totalmente provisionados a Aigón Capital por 23,3 millones, con lo que consigue además la recuperación de las dotaciones. Continúa con las ventas de los inmuebles adjudicados, que en el semestre han crecido en un 10,3%, cifra algo inferior a las que habían conseguido en ejercicios anteriores.

En el aspecto crediticio, parece que Sabadell es, de las entidades que han presentado resultados hasta hoy, la que realmente mantiene la cifra de crecimiento -mínimo- en crédito concedido a la clientela. En unos términos aún muy débiles cuantitativamente pues aún está en el negativo -0,3%, pero cuantitativamente el crecimiento de la financiación a circulante es del 12%. Puede ser un buen síntoma, dado que se empieza a inyectar financiación en factores de crecimiento económico.

Parece que al igual que la mayoría de entidades españolas, Sabadell aprieta el acelerador en la que se está perfilando como una nueva batalla comercial, que no es otra que la búsqueda de las operaciones fuera de balance. Buena prueba de ello es el crecimiento del 46% de los fondos de inversión gestionados, que llegan a los 14,7 millones de euros.

No sorprende que con estas cifras Banc Sabadell haya superado los Stress Tests del BCE con una buena nota, el 8,33 en el escenario adverso. Al igual que en el análisis de Caixabank, sólo falta pedirle al banco y a sus dirigentes algo tan simple como "seny" (sensatez, cordura) en los acontecimientos que estamos viviendo con el tema identitario en Cataluña y que pueden afectar de forma grave a la economía española y, por ende, a la catalana, en unos momentos de leve recuperación.

Rodrigo de Silos

rodrigode@hispanidad.com