La presidenta de IBM España, Amparo Moraleda, se ha convertido en la primera fan del Código de Buen Gobierno Corporativo que propone el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Manuel Conthe. En un restaurante madrileño, se le oyó explicar que ya era hora de que alguien hiciera algo porque la sociedad empresarial española está compuesta por carcamales. Luego se extendió sobre la necesidad de introducir a gente joven que ha vivido en el extranjero, por ejemplo, ella misma o Petra Mateos, a quien tuvo el buen gusto de citar. A esos y, particularmente a esas, es a los que hay que meter en los consejos de Administración. Por el momento, no descendió a detalles, aunque algunos sospechan que el de Telefónica le haría ilusión.
Con el Código Conthe España ha enloquecido un poco más, y así, ya hay espabilados que pretenden hacer negocio, todo sea por la igualdad entre los sexos. Tan alabado desde el Gobierno Zapatero : por ejemplo, un directivo ya está montando una Escuela de consejeras, que no es una Escuela de Sirenas, porque eso precisa de otros requisitos y, además, no es políticamente correcto.
