Sr. Director:
La crisis económica y especialmente de valores ha traducido el descontento y las carencias ciudadanas en un estallido de brotes populistas en Europa.

El fenómeno se ha asentado con rasgos comunes y una aparente habilidad para explotar la desafección con los partidos tradicionales. "Podemos" en España, pero también Syriza en Grecia, UKIP en Reino Unido o el movimiento de Beppe Grillo en Italia, entre otros, se manejan entre una pegadiza retórica catártica y el vacío programático.

Son corrosivos y destructivos en tiempos en los que se precisan soluciones.

Xus D Madrid