• El socialista Javier Monzón asumió las riendas de la compañía cuando se creó, en 1993, con González en La Moncloa.
  • Es la principal empresa de ingeniería de seguridad española.
  • El principal accionista es Bankia (20,12%), ahora en manos del FROB, es decir, del Gobierno.
  • 'A más a más': Josep Pujol Ferrusola sigue trabajando en EuroPraxis, filial de Indra.
  • En 2012, la compañía redujo sus beneficios un 27% y aumentó su deuda un 23%, pero indemnizó a su exvicepresidente con seis millones de euros.
  • Los rumores sobre un nuevo ERE son cada vez más fuertes.

Este lunes nos hemos enterado de que Felipe González (en la imagen) es asesor del presidente de Indra, el socialista Javier Monzón, que lleva en el mismo puesto desde el año 1993, cuando se creó la compañía. Y miren por dónde, González era entonces presidente del Gobierno.

Indra tiene, fundamentalmente, dos ramas: la seguridad y el tratamiento de información, sobre todo de procesos electorales. Pues bien, por mucho que se empeñe Monzón en asegurar que tiene más peso la segunda, lo cierto es que históricamente los contratos más suculentos han sido los firmados con el Ministerio de Defensa. Claro que ahora, con las arcas públicas vacías, tiene que buscarse las habichuelas en otra parte.

El accionista de referencia es Bankia, que posee un 20,12% de la empresa. Y, como saben, Bankia está nacionalizada, esto es, está en manos del FROB, es decir, del Gobierno.

Además, sorprende que entre los consultores de la compañía -concretamente de EuroPraxis, propiedad de Indra- esté uno de los hijos de Jordi Pujol, expresidentes de la Generalitat. Hablamos de Josep Pujol Ferrusola, de los Pujol Ferrusola de toda la vida, que han denunciado que el CNI, que tiene contratos con Indra, les espía. Además, Indra logró contratos con la Generalitat, aunque según Josep, solo representaban el 0,25% de la facturación de la empresa.

Pero ahí no acaba la cosa. En 2012, Indra redujo sus beneficios un 27% y aumentó su deuda en 120 millones de euros (un 23% más), pero indemnizó a su exvicepresidente, Regino Moranchel, con seis millones de euros, cuando dejó la empresa en noviembre. Moranchel llevaba 20 años en Indra. Por cierto, su salida ha permitido el nombramiento como vicepresidente de otro amigo de Monzón, Daniel Pérez Pita, que también preside Inversis. Todo queda entre amigos.

El problema es que junto a esto, crecen de manera importante los rumores de un nuevo ERE en próximas fechas.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com