Contreras cede: Sogecable podrá retransmitir también los partidos de la Selección española. Los trabajadores de la televisión pública no salen de su asombro : por vez primera la directora general defiende los intereses del Ente. Cafarell llegó a amenazar con la dimisión si le obligaban a retransmitir el Mundial y financiar a la Sexta. Contreras ha conseguido sus objetivos: Alemania 2006 se ha convertido en la mejor campaña de lanzamiento del canal más pro-PSOE, al tiempo que sus accionistas han firmado una tregua. Entre Cuatro y La Sexta, entre Polanco y Contreras, Zapatero consigue su imperio mediático
Si la Selección española sigue jugando como hasta ahora es muy probable que todo lo posterior pase a tener una importancia relativa, pero un mundial de fútbol, a día de hoy, representa uno de esos acontecimientos capaces de paralizar un país. El titular es que el canal de Jesús Polanco, Cuatro, y la aún más zapaterista televisión de José Miguel Contreras, La Sexta, han llegado a un acuerdo sobre el Mundial. Telefónica le vendió a La Sexta los derechos del Mundial por 104 millones de euros, previo acuerdo de que esta compartiría la retrasmisión con Cuatro. Pues bien, el acuerdo ya se ha alcanzado, pero no van a compartir: sencillamente, Polanco podrá retransmitir el Mundial (en cerrado, a través del monopolio de Digital ) y en abierto, a través de la Cuatro, todo lo que quiera, incluidos los partidos de la Selección española, la joya del acuerdo, algo que Contreras no quería compartir en modo alguno.
Como ya hemos informado, Contreras perseguía tres objetivos con el Mundial: darse a conocer como nuevo operador, acelerar el arduo proceso de antenización es decir, llegar al máximo número de hogares posible-, y que la TV pública le pagara ese antenización, recomprándole los derechos de emisión ante el ataque de la oposición del Partido Popular, que exigía que todos los españoles pudieran ver el Mundial en abierto y de forma gratuita.
No ha conseguido este último, pero sí los dos primeros. La Sexta ya es conocida en todo el país gracias la Mundial. El proceso de antenización ha crecido fuertemente, aunque no alcanza ni el 30% de todos los hogares. Eso sí, el Gobierno se ha encontrado con el plante de los trabajadores de Radio Televisión Española, que amenaza con bloquear el Ente si se consuma el atropello. Así, cuando ya la directora general Carmen Caffarel había dado orden al segundo canal de que se preparara para cubrir el Mundial, se ha lanzado a realizar unas declaraciones en defensa de su propia casa. A eso se le llama hacer de la necesidad virtud, o de la presión apoyo entusiasta. En cualquier caso, desde el Gobierno se ha pedido a Polanco que acelere las negociaciones con Contreras y que lleguen a un acuerdo.
Y así ha sido. Ahora bien, como es imposible determinar dónde se ve La Sexta y dónde no, el pacto consiste en que Polanco podrá retransmitir a través de Cuatro todos los partidos que quiera, incluidos los de la Selección Española, que era el único monopolio que pretendía quedarse Contreras.
Además, La Sexta, es decir, Globomedia, Mediapro y Televisa, han postergado su enfrentamiento internos para poder lanzar el producto. A partir de septiembre, con una negociación ya en marcha, con informativos y todo lo demás, La Sexta se ha hecho gratis su campaña de lanzamiento.
Lo de las broncas internas entre accionistas no es baladí. Televisa ha puesto el 40% del dinero, y es la que más ha desembolsado. Los dos socios que mandan, Jaume Roures desde Mediapro y José Miguel Contreras de Globomedia, mantienen las mismas diferencias y enfrentamientos que hacen saltar chispas en las relaciones entre el PSOE y los socialistas catalanes del PSC. Hay socios que quieren vender y gente que no ve nada claro cómo competir en el mismo terreno ideológico con la Cuatro de Polanco y con una RTVE ya descaradamente manipulada por el Gobierno Zapatero.
Eso sí, en cualquier caso, Zapatero va construyendo su TV del movimiento, su particular imperio mediático, entre Cuatro, La Sexta y quien desee sumarse.
