Los tres diarios más vendidos de España, El País, El Mundo y ABC, así como los tres económicos, Expansión, Gaceta de los Negocios y Cinco Días han vendido todos sus espacios publicitarios a la constructora Acciona, de la familia Entrecanales. Con un mensaje políticamente correcto (su objetivo es el medio ambiente) Acciona ha hecho caso del consejo de la multinacional publicitaria McCann, y ha monopolizado los diarios llamados nacionales (con la excepción de La Razón) y a los tres económicos.

La megacampaña no es ajena a la difícil transición que ha atravesado la familia Entrecanales y al deseo de José Manuel Entrecanales de imponerse como lo que es: presidente de todo el grupo.

Sin embargo, este tipo de campañas no gustan a todos, como no gustan las realizadas por algunas firmas que compran el cuadernillo de portada y contraportada de algunos medios, especialmente los gratuitos (aunque en el Reino Unido se han llegado a vender a anunciantes portadas -tradicionalmente sagradas e intocables- de la llamada prensa seria).

El siguiente embate de la publicidad contra la información ya ha sido experimentado por Telefónica, al introducir su famosa letra M, de Movistar, en los textos informativos, rompiendo así, aunque mínimamente, la distinción rígida entre información y publicidad. El día en que se llegue al estado final, es decir, publicar informaciones de empresa o instituciones como noticias, entonces el proceso habrá concluido.