Sr. Director:

La historia de Salomón relata el conflicto que presentan ante él dos mujeres respecto de la maternidad de un niño. Ordena Salomón que lo partan en dos y den la mitad a cada una.

Habiendo aceptado una que sea partido, y manifestar la otra que renuncia al niño a favor de su rival antes que verlo muerto, sentencia Salomón que ella es la madre, y se lo entrega. Hoy se hace a la mujer peor que la falsa madre ante Salomón, porque ésta aceptaba la muerte del niño no siendo ella su madre, en tanto que la ley actual permite condenar a su propio hijo; podemos ver a las dos mujeres representadas por nuestra sociedad partida en dos grupos, con independencia del número de personas de cada uno, porque el derecho a la vida es individual y no tiene que ver con la democracia. Salomón, máximo exponente de la sabiduría humana desde hace miles de años, apostó por la vida descubriendo justamente a la verdadera madre. La "ley" del siglo XXI ha pervertido a nuestra sociedad, porque al negar información y ayuda a la madre verdadera, la impele a convertirse en la madre falsa, porque una mujer que asesina al hijo de sus entrañas no merece tal altísimo nombre, el cual supera a la mayor distinción que pueda otorgar el Estado.

Amparo Tos Boix