Sr. Director:

Veo con sorpresa lo que se interesan las ONG de diferentes países por los inmigrantes ilegales que entran en España por Ceuta y por Melilla. Protestan por la valla, quieren que la eliminen y que todos entren a nuestro país. ¿Aún no han puesto los pies en la tierra los miembros de estas organizaciones y han visto que eso, económicamente es inviable?

Y si como dicen, todos tienen derecho a una vida mejor, convendrán conmigo que eso el Estado no lo puede soportar. Si tan caritativos son con el dinero ajeno, ¿por qué no lo son con el propio? El problema quedaría en gran medida resuelto si cada uno de los miembros de estas entidades reivindicativas se llevase a su casa a uno de estos inmigrantes y lo mantuviera: techo, comida, vestido, calzado y educación, en una palabra, y como pretenden que haga el Estad a mesa y mantel.

Manuel Anglada Sabater

marangsa@worldonline.es