Malestar entre las asociaciones de administradores de loterías por el real decreto que privatizará el 30% de la entidad pública

 

El juego online y las casas de apuestas obligan a los gobiernos a cambiar el sistema de juegos.

En estas fechas, nunca mejor dicho. Les ha tocado el gordo y por ello están pensando en cerrar el día del sorteo de Navidad, como protesta. En medio de una semana en la que el Estado de Alerta se convirtió en el centro de la toda la información, el resto de medidas aprobadas ese mismo día quedaron en un segundo plano y vuelven ahora a la palestra.

La privatización de un 30% de las Loterías y Apuestas del Estado ha sido el premio para las administraciones de loterías. Y es que cuando se necesita dinero se trata de rascar de todas partes y esta vez ha sido de las loterías. Parece más bien, pan para hoy y hambre para mañana, pero eso al Gobierno no le importa. Hay que conseguir dinero de donde sea. Y es que con el agujero legal que supone la existencia de las apuestas por Internet, al Estado se le escapa mucho dinero, y cada vez más, por lo que tiene que regular rápido si no quiere perder más.

Así que este año puede ser la última vez que las administraciones den los gordos de Navidad y del Niño siendo totalmente públicas. Quién sabe si no sea el inicio del fin de unos sorteos con tanta tradición.

Curiosamente, los que menos impuestos pagan son las apuestas por Internet.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com