La cadena de restauración se dedica ahora a otros muchos productos, aunque el sándwich frío sigue siendo el gran protagonista. Parece que a Rodilla le van bien las cosas y le han sentado bien los cambios los cambios realizados, a la vista de los resultados de 2015 presentados. En concreto, la cadena de restauración ha facturado 92 millones de euros, un 12,5% más que en 2014, por su renovada imagen y su expansión geográfica por España. Asimismo, también ha crecido el importe de las ventas comparables anuales ( 9,4%), el tráfico de clientes ( 6,5%) y el ticket medio de compra ( 2,7%). Además, la plantilla del Grupo ha crecido un 10%, hasta los 1.900 empleados. Rodilla se dedica ahora a muchos otros productos más allá del sándwich frío (sándwich caliente, bocadillos, foccacias, ensaladas, wraps, etc.) y es referente en este segmento entre cafetería y casual food. A pesar de esto, el sándwich frío sigue siendo el gran protagonista, pues se vendieron casi 22 millones de unidades. Mientras, la venta de focaccias subió un 49,19%; ensaladas, un 37,82% y sándwiches calientes, un 18,19%, entre otros productos. La renovación de la imagen de marca comenzó a principios de 2012 de la mano de Damm, y ya se han invertido cinco millones. En cuanto a la expansión geográfica, la cadena inauguró 18 nuevos locales el año pasado, destacando su desembarco en Barcelona, Zaragoza y Marbella. Además, también se ha orientado hacia un público más joven y va ampliando su catálogo de productos sin gluten. María Carceller, Ceo de Grupo Rodilla, ha afirmado que "2015 ha sido un año muy positivo para la compañía, demostrando el acierto de la nueva estrategia que iniciamos en 2012 en plena crisis". Por tanto, parece que la cadena puso a mal tiempo, buena cara y la apuesta le salió redonda. Cristina Martín cristina@hispanidad.com