A la caída de Pescanova en bolsa el viernes (-10,75%) tse suma la de este lunes, mucho peor (-21%). El saldo deja el precio de la acción, no sólo en mínimo anual, sino en el peor registro desde que regreso a la bolsa, en junio del año pasado.  

La razón se repite: el auto de apertura de juicio oral que sentará en el banquillo a la cúpula de la vieja Pescanova y en impacto de las fianzas en la insolvencia de la sociedad. El valor, en que el que quedaron atrapados 9.000 pequeños accionistas, respiraba al compás de la nueva Pescanova, su único activo (tiene un 1,6%). No tiene nada más, ni actividad, ni empleados.

Pescanova SA se reestrenó, tras cuatro años de ausencia, a 0,44 euros por título, que llegó a multiplicar por cuatro ese mismo mes (hasta 1,96 euros). Se mantuvo por encima del euro durante 2017, pero en enero comenzó a declinar. A mediados de marzo, toco el mínimo de 0,84, el mismo al que cerró el viernes, y tras el batacazo de hoy, baja a 0,66.