63 periodistas asesinados por su profesión, y más de 40 sin que se conozca el motivo. Además, hay 54 secuestrados. Parece que, tristemente, el periodismo es una profesión de alto riesgo en todo el mundo. Por primera vez, dos de cada tres periodistas asesinados (64%) lo fueron en países sin conflicto. Y es que la masacre del semanario satírico francés Charlie Hebdo, ocurrida en París en enero del año pasado, contribuyó a invertir la tendencia. El informe anual de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) arroja de nuevo un balance bastante negro, pues 2015 estuvo marcado por el terrorismo yihadista, sobre todo, por la barbarie del Estado Islámico (EI). En concreto, 63 periodistas fueron asesinados por su profesión y más de 40 sin que aún se conozca el motivo de su muerte. A éstos, hay que añadir 6 colaboradores muertos y 19 internautas fallecidos. Asimismo, 155 periodistas y 162 internautas fueron encarcelados. Y por último, conviene subrayar que al finalizar el año, 54 profesionales permanecían secuestrados en manos de organizaciones terroristas como EI, Al-Nusra y Al-Qaeda. De estos 54, 26 lo estaban en Siria y 10 en Irak, entre ellos, tres freelance españoles (Antonio Pampliega, Ángel Sastre y José Manuel López, capturados en julio, en Alepo). Según RSF, Siria e Irak son los países más mortíferos para los periodistas, con 17 y 11 asesinatos, respectivamente. Además, son los que tienen mayor número de secuestros. Cristina Martín cristina@hispanidad.com