Y aplaza su meta para lograr el 2% de inflación hasta 2019. El Banco de Japón volvió a retrasar hoy la fecha para cumplir su meta de generar una inflación estable de en torno al 2 por ciento, situándola como pronto en torno al segundo trimestre de 2019, recoge Entorno Inteligente. La entidad activó en 2013 un gigantesco programa de flexibilización monetaria de cara a lograr la citada meta inflacionista, aunque la caída de los precios del crudo y la ralentización global han obligado al Banco de Japón a retrasar su plazo de consecución y a activar otras medidas adicionales. Entre estas se cuentan una tasa negativa (del -0,1 por ciento) para los depósitos de los bancos y un control de la curva de rendimientos para mantener en torno al 0 por ciento los tipos a largo plazo. En este sentido, la junta de política monetaria de la entidad decidió -por 7 votos frente a 2- en su reunión mensual concluida hoy mantener intacta esta política monetaria. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com