• Todos, porque las multinacionales farmacéuticas no pueden arriesgarse al fallo, actúan antes de la fecundación… y  después.
  • En el siglo XXI, el único anticonceptivo no abortivo es el preservativo. Sólo que eso no es muy católico, ¿verdad?
  • Y Pablo VI jamás autorizó a las monjas en peligro de violación a abortar o a tomar la píldora.
  • La industria de la muerte es cada día más eficaz. Si no, pregunten en Bayer.
Erre que erre. Los progres insisten en que el Papa Francisco (en la imagen) ha permitido el uso de anticonceptivos en la lucha contra el virus zika. Pues no, es mentira. Continuemos desenhebrando el hilo del confusión y de la estafa del zika. Atención: mensaje progre global: mientras no controlemos al virus del mosquito aborto tu bebé nacerá con tremendas enfermedades. Ojo, no dicen que no se queden embarazadas sino que se embaracen y luego aborten al niño. Naturalmente, no sabemos si algo de esto es cierto, ni tan siquiera conocemos la génesis del zika y hay sospechas para todos los gustos sobre su origen y desarrollo. Mucho me temo que las palabras del Papa Francisco en el avión que le traía de vuelta a Roma, desde México, no han hecho más que acentuar la confusión. Al asegurar que una cosa es el aborto -matar- y otra evitar que nazca un niño, me temo que el Papa Francisco hablaba del pasado, no del siglo XXI. Vamos a ver: el aborto quirúrgico, trocear al bebé en el vientre de su madre resulta impactante pero lo cierto es que la inmensa mayoría de los abortos actuales, dados los increíbles progresos de las multinacionales farmacéuticas, son químicos, vía píldora. En otras palabras, repitan conmigo: todos los anticonceptivos presentes hoy en el mercado son potencialmente abortivos: actúan antes y después de la fecundación. Pero, esta es la cuestión, también después. Es decir, que la mujer que toma la píldora, cualquiera de las píldoras presentes en el mercado, y que nadie define como abortivo, puede estar abortado a su bebé. Dicho de otro modo: se acabó la época del aborto quirúrgico y ha llegado la del aborto químico, menos cruel, menos visible pero igualmente homicida. No hay alternativa porque ha dejado de haber diferencia entre anticoncepción y aborto. Si no, pregunten en Bayer. Y por cierto, esto no ocurría en tiempos de Pablo VI y ahora diré por qué digo esto. No es verdad que Pablo VI permitiera abortar o tomar la píldora a monja alguna, no en el Congo Belga ni en Andalucía occidental. Sandro Magister lo ha explicado bien. Pero, atención es que, aunque lo hubiere permitido estaríamos hablando de otra época, en la que los primeros anticonceptivos hormonales no actuaban después de fecundación, sino antes. Insisto: en Bayer saben mucho. A día de hoy el único antibaby no abortivo es el preservativo. Otra cosa es que sea seguro… para evitar el niño como para evitar el sida. Pero esa es otra cuestión. Eulogio López eulogio@hispanidad.com