• Y qué detallazo: el PSOE permitirá la asignatura de religión en los colegios privados.
  • ¿Y en los privados concertados? No, en esos tampoco habría religión.
  • El matrimonio Meritxell Batet y José María Lasalle son dos progres, de izquierdas y de derechas. O sea, dos ateazos.
  • La libertad de enseñanza consiste en que los padres elijan la educación de sus hijos. Y los padres son todos laicos.
  • El PSOE quiere sustituir la religión por Educación para la Ciudadanía.
  • Ahí les enseñarán, a ellos y a ellas, como copular desde la más tierna pubertad sin temor a quedarse embarazada. A eso, Sánchez le llama "valores constitucionales".
Si quieres conocer a fulanillo dale un carguillo. Meritxell Batet (en la imagen junto a Sánchez) era la chica moderada del PSOE pero no deben ustedes emplear el machista argumento de que ello se debía a estar matrimoniada con José María Lasalle, secretario de Estado de Cultura del PP. No, ella era una progresista moderada de izquierdas de la misma forma que él es un progresista moderado de derechas: o sea, dos ateazos con la copa de un pino. Y recuerden: moderación y medrocridad empiezan por la misma letra. Y la mala uva también. Por eso, la número dos en las listas por Madrid no ha especificado, loado sea su nombre. "El PSOE propone eliminar la asignatura de religión en los colegios públicos, no en los privados". ¡Cuánto bueno, qué detallazo! Es decir, que expulsan a Cristo de la esfera pública pero nos permiten hablar de él en la privada: ¡para que luego digan que los socialistas son anticlericales! Hombre, eso sí, habrá que ver si de los colegios privados se restan los privados concertados, porque en ese caso, Meritell, princesa, con todo respeto, vete a tomarle el pelo a tu abuelita. Y eso es precisamente lo que propone Batet. ¡Hay que ser cínica! Ya lo ha dicho Pedro Sánchez, su jefe de filas, el mismo fulano que insiste en que la supresión de la asignatura de religión no va contra nadie. ¡Nooooooooooo! Se trata de lograr el Estado laico, o sea, ateo y sobre todo, antiteo, razón por lo cual los padres de familia, todos ellos laicos no serían padres de familia si no curas retorcidos, no pueden elegir la educación que reciben sus hijos, ni en los colegios públicos ni, cada vez menos, en los privados. Tampoco nos rasguemos las vestiduras con el PSOE. El PP ha sido igual de cernícalo. Así, otro ateazo, progre de derechas, el jefe del marido de Meritxell. Es decir, José Ignacio Wert, ha reducido los fueros de la enseñanza de religión en las escuelas. Y, por último, por si todos esos elementos no fueran suficientes para evitar que los niños sean educados cristianamente (algo muy poco laico) ya se encargan muchos profes de religión de sacarse un sueldo hablando en las aulas de cualquier cosa menos de la fe en Cristo y, sobre todo, del amor a Cristo. Pero todo esto es muy sencillo: Sánchez y Batet son dos progres, y el progresismo todos sabemos lo que es: "Abajo los curas y arriba las faldas". O sea, el PSOE y, cada vez más, el PP. O, si lo prefieren en 'emergente': Ciudadanos, progres de derecha y Podemos, progres de izquierda. Pero no se crean que Pedro Sánchez no tiene una alternativa en positivo a la enseñanza de religión. Él propone el regreso de Educación para la Ciudadanía (EpC), donde, mayormente, se les explicará, a ellos y a ellas, cómo copular desde la más tierna pubertad sin peligro de caer en el mal: es decir, de quedarse preñadas. ¿Qué se creían? El PSOE es un partido de alternativas. Eulogio López eulogio@hispanidad.com