• Europa, un continente donde nadie está dispuesto a dar la vida por nada.
  • Ni Obama cambia de táctica ni Europa convoca a la defensa. Y así, pasito a pasito, pues nos suicidamos.
La mitad de Siria y en breve dispondrán de la mitad de Iraq. Al presidente norteamericano, Barack Obama, no le preocupa mucho el asunto. Seguirá bombardeado desde el aire mientras los fanáticos musulmanes masacran cristianos y, de paso, a todo el mundo que no les caiga simpático. Pero Obama es un hombre tan humilde que ha llegado a reconocer la verdad de las cosas: él nunca se equivoca. Así que va a seguir bombardeando desde el aire… y no mucho. Lo de Europa es peor, porque sencillamente no mueve un dedo. Arrinconada por el fundamentalismo islámico, y más cerca de Irak que la costa este norteamericana, Europa no mueve un dedo porque es un continente donde nadie está dispuesto a dar la vida por nada. Mientras, el Estado Islámico avanza y gana adeptos: todos los majaderos del mundo desean sumarse a sus filas y va extendiéndose por el Magreb, el Golfo de África y, a través de Afganistán, llegará al peligroso Paquistán. ¿Se imaginan un fanático con bombas atómicas? Pues eso es Paquistán. Pero ni Obama cambia de táctica ni Europa convoca a la defensa. Y así, pasito a pasito, pues nos suicidamos. Eulogio López eulogio@hispanidad.com