• La grandeza consiste en elevar a 1.000 euros el salario mínimo.
  • No es suficiente pero mejor que el PP de Rajoy, que ha congelado el SMI.
  • La miseria del PSOE consiste en que no piensa cambiar la reforma laboral del PP... después de denigrarla durante una legislatura.
  • Y, sobre todo, que la subida del SMI no irá acompañada de una bajada de cuotas sociales. Eso no es posible.
Empecemos por las grandes. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez (en la imagen) promete elevar a 1.000 euros el salario mínimo mensual (no sabemos si brutos o netos) pero, en cualquier caso, tal es la propuesta que este modesto digital ha hecho siempre: los 757 euros brutos por mes del momento actual debían elevarse a 1.000 euros. Como ya hemos explicado en Hispanidad, para cumplir con los tratados internacionales sólo para eso, la subida del SMI tendría que ir hasta los 1.300 euros, pues esto supone el 60% del salario medio (bruto mensual por 12 pagas), cifrado en los 2.108 euros mensuales. Por tanto, Sánchez se queda corto pero siempre mejor que el PP, que simplemente ha congelado el SMI. Al lado surge Luis de Guindos, quien repite la misma tesis de su colega Cristóbal Montoro: el SMI sólo lo cobran unos poquitos. Sí, en efecto, son unos 150.000 españoles pero recuerden que el SMI indicia toda la escala de salarios bajos. Si el chico de los recados cobra el salario mínimo el encargado cobrará mucho más que el SMI. Y todo esto no es baladí por cuanto hablamos de una España que se caracteriza por dos cosas: mucho paro y bajos salarios, lo que conlleva mucha economía sumergida y mucha rentas de mera supervivencia. Hasta ahí la grandeza del PSOE. Vamos ahora con las miserias. En primer lugar, tras pasarse una legislatura con la demagogia de que en cuanto regresaran al poder iban a derogar la reforma laboral de la ministra Fátima Báñez (una de las mejores reforma del PP aunque se quedó corta) ahora resulta que Sánchez, que ya se ve presidente, asegura que no modificará las condiciones de contratación y despido implantadas por el PP. Pues muy mal, señorito. Mucho criticar y ahora te rajas. Además, sí que hay que modificar el número de contratos, reducido a cuatro por la ministra Báñez: pero en sentido pepero. Esto es, hay que dejarlo en un solo contrato indefinido y con despido libre aunque con indemnización pactada de antemano. La segunda miseria es que el demagogo de Pedrito no aclara qué va a hacer con las cuotas sociales. Porque claro, resulta que los salarios son bajos en España pero no los costes laborales. Es decir,  los impuestos laborales son altísimos para el empresario. Por tanto, hay que aumentar salarios y reducir impuestos, cambiando cuotas por IVA. Pero claro, eso ya es para estadistas y Sánchez es un poquito cobardón. Como don Mariano, dicho sea de paso. Eulogio López eulogio@hispanidad.com