Cayo Lara frente a Pablo Iglesias, comunistas frente a neocomunistas
Asegura Cayo Lara (en la imagen) que Podemos ha lanzado una opa hostil contra Izquierda Unida, es decir, con la coalición que lidera el Partido Comunista de España. ¡Hombre, podía haberse dado cuenta hace meses! Pero, en cualquier caso, la amiga Tania está siendo el caballo de Troya en la coalición comunista de forma asaz visible.
Lo cierto es que hay una batalla entre comunistas y neocomunistas (no llamar neocom para no confundir, porfa). Lara es un comunista de la vieja escuela, pétreo, coriáceo que, al revés de los socialistas, no ha abjurado del marxismo. Si le dejaran haría la revolución en las calles o al menos añora los viejos tiempos de la mano en la escopeta. Como buen eurocomunista, tras Solidaridad y la caída del Muro, ha aceptado las urnas a regañadientes y la democracia con reservas. Lo cierto es que esa democracia le ha permitido obtener una serie de escaños que son los que le aseguran dinero para financiar la causa y un altavoz mediático para mantenerse en el podio.
Pablo Iglesias (en la imagen) es otra cosa. Su tronco es el comunismo, pero son neocomunismo. No sólo no aceptan las urnas para hacerse con el poder sino que quieren seguir ganando en las urnas. Manipulando el sentir general, claro está, pero siempre a través de las urnas. Esta es la diferencia de los neocomunistas frente a los comunistas de la vieja guardia, tipo Cayo Lara.
Y también la calle. Iglesias es Gramsci como Cayo Lara es Lenin o al menos Rosa Luxemburgo. Dos ramas de un mismo tronco. Ahora bien, Iglesias es hijo del 15-M, un movimiento un pelín majadero que sabía contra quién luchaba pero no con quién luchaba ni para qué. Y ahí sigue Pablo Iglesias. Mucho más intelectual, aunque no sea profesor, Cayo Lara que Iglesias. Sí, aunque no sea profesor universitario, Lara sabe lo que pretende y los medios para conseguirlo. Iglesias no sabe lo que quiere, salvo alcanzar el poder, y no entiende lo que denuncia. Es más ducho en el diagnóstico que en la terapia.
Comunistas frente a Neocomunistas. Los segundos son más peligrosos. Por ejemplo, es difícil que Cayo Lara engañe a ningún católico; Pablo Iglesias sí.
¡Ah!, y los neocomunistas también son mucho más pedantes. No hay más que ver a doña Tania explicándole a Cayo Lara que no sabe leer la historia de España. Bonita, no seas cursi.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com