Sr. Director:
Ante lo que dijo la ministra de Educación en funciones, es lógico que si no hay disponibilidad en un determinado colegio, los padres no puedan tener plaza en ese colegio. Pero eso no significa que no puedan elegir el tipo de colegio que les parece conveniente y que ese no sea un derecho constitucional. Son dos cosas diferentes. La ministra aseguraba también que los padres no tienen que preocuparse porque podrán elegir centro dentro de los límites establecidos por la ley y dentro de la programación general. Y precisamente son las condiciones que plantea a la libertad, las que ponen en peligro esa libertad de las familias. Si el límite de la libertad es la programación y no se tiene en cuenta la demanda social, se puede restringir severamente la capacidad de optar. La reforma educativa que prepara el PSOE somete el desarrollo de la escuela concertada no a lo que pidan los padres, sino al criterio ideológico de quienes gobiernen en las Comunidades Autónomas. Hay es donde se aprecia un miedo a la libertad.