Sr. Director:

Chile vive desde hace días un estallido de protestas violentas y de desórdenes públicos que no se conocían desde la época de la dictadura. Hay al menos ocho muertos por los disturbios provocados por la subida del precio del billete de metro, un pretexto que esconde un amplio malestar social.

El país había sido hasta hace muy poco un auténtico oasis. La economía de Chile es una de las que más crecen en América Latina, tiene instituciones sólidas, un banco central realmente autónomo, políticas públicas solventes e inflación baja. Toda una serie de logros en su contexto regional. La clase media ha mejorado objetivamente su calidad de vida. Pero no se advierten grandes mejoras en empleo y salarios. Piñera llegó al poder prometiendo un alto crecimiento que dejara atrás la desaceleración de Bachelet. Eso no ha sido posible, entre otros motivos, por la caída del precio del cobre, principal producto de exportación.