El presidente del Gobierno dice que "Hay cosas que han sucedido en las últimas semanas que necesitan una clarificación", "que quiero trasladar a la Conferencia Episcopal y al Vaticano". Zapatero califica de "muy grave" que los obispos dijeran que hay algunas leyes aprobadas que disuelven la democracia. Afirma que el único contrato que tienen los inmigrantes es "cumplir las leyes" y desvela que Sarkozy quiere la ayuda española para repatriar inmigrantes porque "somos el país que más repatría" al Norte de África. Insiste en la "transparencia" en la negociación con ETA, pese a que reconoció que había negociado tras la T4. Sobre economía: "No estamos en una crisis económica, tenemos alguna dificultad que nos viene de fuera" y aclara algo deslumbrante sobre los 132 mil nuevos parados: "Son personas que se han apuntado al paro, que no es lo mismo, porque al paro se apuntan personas permanentemente en busca de empleo". Confirma una próxima medida "pensando en el futuro de la familia, pensando en los niños".

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en Punto Radio, ha secundado la amenaza de Pepiño Blanco a la Iglesia de que tras el 9 de marzo ya nada será igual: "Hay cosas que han sucedido en las últimas semanas que necesitan una clarificación en cuanto a la actitud de la Conferencia Episcopal y de algunos cardenales. Creo que el tiempo de la clarificación ha de ser después de las elecciones, por si me corresponde a mí hacer esa clarificación, que la debemos hacer con serenidad y calma. Pero ha habido dos hechos que quiero trasladar a la Conferencia Episcopal y al Vaticano, que es el Estado con el que tenemos relaciones". Se refería al discurso el 30 de diciembre de los cardenales y a la nota de la Conferencia Episcopal.

Luis del Olmo

le pregunta entonces qué significa esa ‘clarificación': "Las reglas van a cambiar algo, después de dialogar a fondo y de explicarles que hay cosas que en la relación entre dos estados, las relaciones tiene que tener unos parámetros de respeto. Yo pido el respeto que tienen ellos".

Del Olmo

le dice que "como esa respuesta se la tenga que dar el que puede ser nuevo presidente de la Conferencia Episcopal, Rouco Varela, va usted dado, me parece que no va a rectificar". Responde el presidente: "La democracia es un sistema que se hace respetar porque representa a los ciudadanos, y la democracia española y el Estado se va a hacer respetar". Zapatero ha calificado de "muy grave" decir que algunas leyes aprobadas disuelven la democracia, "es tanto como no reconocer que es el Parlamento quien hace las leyes democráticas y que por ser democráticas merecen todo el respeto". Quizá se olvide el presidente de que ha habido leyes en la historia aprobadas democráticamente que disolvían la democracia, como las de los nazis. Es decir, que una ley, por el hecho de ser aprobada democráticamente, no tiene por qué ser justa necesariamente.

Sobre la propuesta de Rajoy sobre inmigración, con un contrato de integración con derechos y obligaciones, el presidente ha dicho: "¿Eso qué es? Lo que los inmigrantes tienen que hacer en España es cumplir las leyes, ese es su contrato, como todos los ciudadanos. El contrato de derechos y debes está en las leyes y lo otro es superfluo y no tiene ningún contenido". Zapatero ha contado también que Francia ha pedido ayuda a España para repatriar inmigrantes: "Sarkozy lo que quiere es sumarse a España porque España en estos momentos es el país que más repatría, y que ha logrado las mejores relaciones con el norte de África y con los países del África Subsahariana, y Francia nos pide a ver si ellos pueden con la colaboración con España producir esas repatriaciones".

Zapatero

ha reconocido también que próximamente va a anunciar una medida de apoyo a la familia "pensando en el futuro de la familia pensando en los niños".

Respecto a si lamenta haber negociado con terroristas después de la T4, algo que mucha gente no le perdona, Zapatero se iba por los cerros de Úbeda: "No ha habido en la historia de la democracia un proceso de diálogo en que haya existido tanta transparencia, donde un presidente del Gobierno haya tenido el respaldo del Parlamento y en donde los compromisos que establecí con la ciudadanía y en el Parlamento se han cumplido a rajatabla: primero, el fin de la violencia no tendrá un precio político y aquellos que pretendan usar la violencia y negociar a la vez, sepan que no tendrán la continuidad en el diálogo".

Preguntado si no lo hará ya nunca jamás, ni aunque se lo pidan misteriosas presiones internacionales, no ha respondido: Quiero decir que no son misteriosas, seamos responsables y serios". Y aprovechaba para meter la pullita a la Iglesia: "¿O es que el Gobierno de España, Francia o Suiza no colabora con el de Colombia y con instancias de la Iglesia para que haya procesos de diálogo frente a la violencia terrible de las FARC?". "He soportado muchas mentiras: que había entregado España, que había entregado Navarra, que el Estatuto de Cataluña era fruto del diálogo con ETA, todo eso se ha dicho, todo era mentira y los que lo han dicho no tienen ninguna credibilidad". "Soy una persona que en la vida pública ni se calla ni se enfada".

En cuanto a la situación económica, afirmaba que "no estamos en una crisis económica, tenemos alguna dificultad que nos viene de fuera lo que no quiere decir que no haya que reaccionar desde dentro". Añadía además el discurso del manual socialista: "en estos 4 años, cuando Europa crecía la mitad, nosotros hemos crecido con una gran fortaleza, hemos creado tanto empleo como Alemania, Francia e Inglaterra, tenemos superávit público como ningún país del G7, y tenemos una economía y un sector público solvente".

Del Olmo

le decía que se lo cuente a las 132 mil personas que se han quedado en el paro, y el presidente matizaba: "son personas que se han apuntado al paro, no es lo mismo. Porque al paro se apuntan personas permanentemente, en busca de empleo, bien porque cumplen la edad o porque tienen deseos de trabajar". No sabíamos que los que se apuntaban al paro lo hiciesen en busca de empleo, una lumbrera, sí señor.

Zapatero

explicaba que ahora tenemos "un ajuste" como consecuencia del sector inmobiliario. "Va a haber un ajuste en el sector de la construcción y tenemos capacidad porque la economía está con fortaleza en los demás sectores para absorber y seguir creando empleo". "Hay sectores de la actividad que demandan empleo, que es una de las circunstancias que permiten reabsorber empleo y seguir con el objetivo para los próximos 4 años de acercarnos y llegar al pleno empleo, en torno al 7%. Esto tiene credibilidad porque cuando llegamos al Gobierno, la tasa de paro estaba en el 11,3% y ahora está en el 8,5%". "Todo el mundo sabe que hay problemas en la economía norteamericana que se han trasladado a Europa y por tanto también a España". "Ni ignorar que pasan cosas ni exagerar y tomar medidas para que la economía siga creciendo y la desaceleración sea razonable".

El presidente del Gobierno también ha dicho que "sería conveniente que determinadas formas de hacer política desde el respeto y la educación primaran en el sector de la derecha y no estuviera en manos de las posiciones más radicales, algunas de ellas que se fabrican intelectualmente desde alguna emisora", en alusión a la COPE.

Respecto a los problemas del agua, el líder socialista acusaba al PP de no tener "las ideas claras" en algo "tan trascendental". Explicaba que ante la sequía en Cataluña y Barcelona están trabajando en la posibilidad de cubrir las necesidades de abastecimiento de agua con la desaladora de Carboneras, en Almería. "El futuro para las zonas con más problemas de agua es la desalación, es agua segura, la vamos a tener siempre, se produce siempre". "El debate sobre el trasvase del Ebro sería llevar al agua que hoy no hay a Murcia, Alicante y Almería, por tanto hemos acertado en la orientación".

Preguntado por si se arrepiente de no haberse levantado ante la bandera de EEUU, el líder socialista dice que no porque "fue un gesto que tuvo que ver no con la bandera en sí de EEUU sino que de manera sorpresiva se hizo desfilar a los países que acababan de invadir Irak, hecho ante el que yo tenía una oposición notable". "Me pareció que se había jugado con un tema con el que la mayoría estaba en contra de la guerra de Irak".

José Ángel Gutiérrez