Sigue siendo la opción real. Por fin, y tal y como exigían los patrocinadores, las dos iniciativas españolas para participar en la Copa América de Vela (Valencia 2007) se han unido para lanzar un único desafío español.

Una estaba capitaneada por el armador Agustín Zulueta, y contaba con el apoyo de Javier Banderas (hermano de Antonio Banderas) y de los hermanos Doreste. Era la más avanzada, pero entonces se cruzó en el camino el hombre de S.M. Juan Carlos I para cuestiones de vela: Pedro Campos y Calvo Sotelo. Los patrocinadores, con mucha lógica, exigían que ambas iniciativas llegaran a un acuerdo, pues la broma de participar en la Copa América puede salir por los 100 millones de euros por desafío.

Pues bien, se ha llegado a un acuerdo. El grupo de Zulueta dispondrá de un 29% de las acciones, por un 20% de Pedro Campos. Pero no se dejen engañar. Mandará Pedro Campos, apoyado por otro próximo de la Zarzuela, José Cusí, y por el maestro del Rey en materia de vela, el danés Ib Andersen. En teoría, el Club Náutico de Valencia dispondrá de otro 10%, y su homónimo de Barcelona otro 10%. Se supone que éste último era pro-Zulueta pero está controlado por más amigos del Monarca, como la familia Puig. La Federación de Vela, asimismo monárquica, dispone de otro 10%, lo que, por cierto, prohíben sus estatutos. El resto queda para los patrocinadores, especialmente Iberdrola, aunque esos patrocinadores apoyan también a las sociedades de Pedro Campos y Zulueta.

Telefónica, por su parte, se encuentra patrocinando a Pedro Campos en la Volvo Ocean Race, la Vuelta al Mundo que sale de Vigo, por la que la Xunta de Galicia ha pagado una barbaridad y que, por el momento, sólo cuenta con cuatro equipos inscritos. Para acabar de arreglarlo, don Manuel Fraga vendió que el barco se construiría en Galicia, se supone que para apoyar la crisis de los astilleros por lo que la embarcación se está construyendo en Australia.

Telefónica desearía verse libre de tantos compromisos pero no puede. Y no porque en su Consejo figure el anterior jefe de la Casa Real, Fernando Almansa, sino porque Zarzuela tiene otro valedor más importante para sus intereses: Francisco Bergia, más conocido en Telefónica como el metrosexual, por su innata elegancia y por su convicción de que el mejor escudo para Telefónica es su Majestad el Rey.