Sr. Director:
El pasado fin de semana, los chicos del PSOE se reunieron en Madrid en un macroevento –carísimo, por cierto, y que hemos pagado algún constructor recalificado, pero sobre todo usted y yo- para debatir los temas que realmente nos importan:

- ¿La crisis?, ¿la falta de libertad?, ¿el déficit de las autonomías?, ¿las carencias democráticas?...

- No hombre, no. Las cosas importantes.

- Ah! ¿Quiénes somos?, ¿adónde vamos?, ¿de donde venimos?, ¿si estamos solos en la galaxia o acompañados?

- ¡No hombre! ¡Que no te enteras! Han hablado del aborto, de la eutanasia, de quitar los crucifijos de los actos públicos…

¡Menos mal! Llevaba yo meses sin dormir por culpa de los crucifijos oye. Me voy a ir de vacaciones tranquilo. Pero, ¿me dices que han hablado de la eutanasia?

Hace 23 años se aprobó en España la ley del aborto. El aborto es un tema complicado. Genera posturas muy enfrentadas y polarizadas. Hay gente en contra y gente a favor. Yo estoy en contra y me parece un crimen, pero no quiero discutirlo ahora. Sólo se que veinte años después nadie discute que aquella ley fue un fiasco. Un coladero. Que se han hecho burradas a manta. Y esto es una opinión común a todo el mundo: a los que quieren abolirla y a los que quieren ampliarla.

Y ahora dicen que van a aprobar una cosa para lo de morirse. Oiga mire, que no me fío. Que ya ando en esa edad en la que si van a tardar otros 25 años en "ajustarla" cualquiera se fía de ir con 85 años a ver alguien con bata blanca.

¿Usted se fía? Mi suegra es médico, así que si quiere... le invito. Yo de ella, me fío.

Carlos Andreu Pintado

candreu@hotmail.com