Sr. Director:
Soy un miembro del Camino Neocatecumenal y escribía para felicitarle por su artículo, no por estar a favor o en contra, sino por defender algo que llevaba tiempo buscando en los periodistas: la neutralidad. El periodismo de hoy día ha degenerado de tal forma que no sólo no informa, sino que desinforma, creando en la mente de la gente una falsa idea que provoca odios, reticencias, intolerancias...
Hoy, estos mismos periodistas se llenan la boca al hablar de tolerancia, de libertad de expresión. ¿Acaso son tolerantes muchos con la Iglesia? ¿Tienen respeto por las personas y creencias que forman parte de la misma? ¿Por qué se defiende tan vehementemente el derecho de ser homosexual y se ridiculiza el hecho de ser católico y, ahora, neocatecumenal?
El periodismo huele a podrido, pero con gente como usted no me extrañaría nada en que reviviera y se renovara. Ha dado toda una lección con este artículo de sensatez y amor profundo a la verdad.
Jacob Bellido
kicanti2@yahoo.es