El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha utilizado un motivo religioso para felicitar la Navidad y esto ha ofendido mucho, mucho, a los progres de izquierda (los de derechas a lo mejor se han callado por disciplina de partido). Así debe ser en un Estado aconfesional.

Ahora bien, podemos ir del sujeto al objeto. Se trataba de una felicitación navideña. Y entonces, ¿qué celebramos en Navidad? El Nacimiento de Cristo, el Verbo encarnado. Y entonces, ¿cómo se puede ilustrar la Navidad sin aludir a ningún hecho religioso, siendo la Navidad una fiesta religiosa?

Una felicitación navideña sin motivos religiosos es como un progresista inteligente: una contradicción 'in terminis'. O celebras la Navidad o no la celebras. O felicitas la Navidad con motivos religiosos o no la felicitas en modo alguno, seas el presidente del Congreso o Perico de los Palotes.

Eulogio López

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