En definitiva, quiere el modelo del Tripartito catalán. Es cierto que lo quería con CIU, no con los independentistas de ERC, y lo quería con tanta fuerza que trató de engañar a Montilla dictando que el presidente de la generalitat fue Artur Mas, sólo que su correligionario se le adelantó y pactó con comunistas y separatistas.
Ahora Patxi López se enfrenta a ZP porque se niega al social-nacionalismo. Tiene razones para hacerlo, es una oportunidad única de desnacionalizar el País Vasco, que buena falta le hace, porque Vasconia se ha convertido, no sólo en una tierra acobardada por una minoría violenta, sino en algo más: se ha convertido en un club social de los nacionalistas, club financiado con dinero público, desde las ikastolas ideologizadas hasta las sociedades gastronómicas.
Pero eso a ZP le importa poco: lo único que desea es permanecer en Moncloa hasta su jubilación. Esperemos que gane López.
Eulogio López
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