Sr. Director:
Si Goya levantara la cabeza, me da la impresión que no hubiera pintado un solo cuadro con tal de que no se diera su nombre a semejante festival que más que de cine, es de peticiones, reclamaciones y reivindicaciones. Unas reivindicaciones que ningún español hemos pedido, pero sí buenas películas.
Y por una vez que una organización (AVT) le pide que se pongan una pegatina para sentirse acompañados tras haber sufrido la barbarie terrorista, nuestros queridos actores aprovechan para dar la nota, hacer un poco lo que les da la gana y pedir una libertad de expresión, que no veo que haya peligrado en ningún momento (ojalá fuera así, porque hay cada película inmoral, impertinente y de tal despropósito, que más hubiera valido, al menos, la sombra de una censura… y, de paso, también a la ministra, que aún no sé con qué criterio califica las películas como aptas y no aptas para ciertas edades).
Como dijo el señor Aznar en su día, si una lengua, idioma, necesita de una subvención para subsistir es porque está en decadencia. Pues yo digo, que si el cine español necesita una subvención, es porque está en decadencia, y ¿qué hacer ante esto? Pues, sencillamente, quitarle la subvención que tiene, hasta que se comprometan a hacer un buen cine, donde la madre no resulte estar separada de su marido porque se ha enamorado de la madre del mejor amigo de su hijo; y hasta que se comprometan a hacer una "gala" donde lo importante sean los grandes actores, los buenos trabajos, los buenos guiones, fantásticas interpretaciones, y no las reivindicaciones contra la guerra, el Gobierno o el apoyo a "el pelota vasco" (si me permite copiar la idea de un artículo de Hispanidad).
Porque, desde luego yo, prefiero que subvencionen un material escolar, unas actividades deportivas, unas guarderías o un centro de estudios biológicos en busca de una moral y ética de lucha contra el sida y otras enfermedades, a que les den dinero a ésta gente que se lo gasta en pancartas, pegatinas y vestidos para lucir en la gala. Bueno, lo de "vestidos" va por "ellos", porque "ellas" usan poca tela, que parece que los trajes se han quedado a medio hacer.
Si Goya levantara la cabeza, no dudo de que cobraría una indemnización importante por ensuciar su nombre para este mamarracho. Hablando de indemnizar, yo aún estoy esperando.
Alejandro Ruiz-Mateos
aruiz_mateos@hotmail.com